Que el pueblo decida el futuro del proyecto alternativo de nación: AMLO
Que el pueblo decida el futuro del proyecto alternativo de nación: AMLO
"Que nos ganen en las urnas"
Andrés Manuel López Obrador
Los adversarios están desesperados y han venido actuando con bajeza y sin escrúpulos morales ni políticos de ninguna índole.
Se están exhibiendo sin tapujos, están mostrando el cobre, demostrando que no les importa hacer el ridículo y, lo que es más grave, poner en riesgo la estabilidad del país.
Esta reacción exacerbada no podría explicarse, únicamente, por animadversión personal o por las diferencias entre grupos, partidos o gobiernos que son consustanciales a un sistema democrático.
En el fondo, esta actitud tiene que ver con el miedo que provoca el que podamos tender la mano a los olvidados y cambiar la política de siempre: ésa donde todos los intereses cuentan, menos el interés del pueblo.
Lo cierto es que se avivaron en los últimos tiempos el debate y la confrontación entre dos proyectos históricos de nación, distintos y contrapuestos: no es casual que los ataques a nuestro gobierno se hayan intensificado cuando los programas que se aplican en la Ciudad tienen los mejores niveles de aceptación y respaldo popular.
Primero fue el asunto del “Paraje San Juan”. Posteriormente, en enero de este año, vino la embestida sobre el Coordinador General de Logística. Más adelante, el primero de marzo se desató el escándalo de los videos. Pero, no conformes, en mayo me fabricaron el caso “El Encino”, mediante el cual me quieren desaforar, inhabilitar y meter a la cárcel, por haber intentado abrir una calle de acceso a un hospital y haber violado, supuestamente, el auto de suspensión provisional de un amparo.
Cada día nos vemos sometidos a fuertes críticas y presiones que, previsiblemente, arreciarán, porque el propósito es parar, a como dé lugar, el proyecto que muchos mexicanos estamos impulsando, con miras al 2006.
Por eso, hoy 6 de julio, Día de la Democracia en la Ciudad , desde aquí me dirijo a nuestros adversarios políticos para decirles que no se vale que a mí o a cualquier otro ciudadano, aunque representemos proyectos distintos y contrapuestos, nos quieran quitar, a la mala, torciendo la ley, nuestros derechos políticos. Que nos ganen en las urnas, eso es lo que les estoy pidiendo.
Andrés Manuel López Obrador
Andrés Manuel López Obrador
Los adversarios están desesperados y han venido actuando con bajeza y sin escrúpulos morales ni políticos de ninguna índole.
Se están exhibiendo sin tapujos, están mostrando el cobre, demostrando que no les importa hacer el ridículo y, lo que es más grave, poner en riesgo la estabilidad del país.
Esta reacción exacerbada no podría explicarse, únicamente, por animadversión personal o por las diferencias entre grupos, partidos o gobiernos que son consustanciales a un sistema democrático.
En el fondo, esta actitud tiene que ver con el miedo que provoca el que podamos tender la mano a los olvidados y cambiar la política de siempre: ésa donde todos los intereses cuentan, menos el interés del pueblo.
Lo cierto es que se avivaron en los últimos tiempos el debate y la confrontación entre dos proyectos históricos de nación, distintos y contrapuestos: no es casual que los ataques a nuestro gobierno se hayan intensificado cuando los programas que se aplican en la Ciudad tienen los mejores niveles de aceptación y respaldo popular.
Primero fue el asunto del “Paraje San Juan”. Posteriormente, en enero de este año, vino la embestida sobre el Coordinador General de Logística. Más adelante, el primero de marzo se desató el escándalo de los videos. Pero, no conformes, en mayo me fabricaron el caso “El Encino”, mediante el cual me quieren desaforar, inhabilitar y meter a la cárcel, por haber intentado abrir una calle de acceso a un hospital y haber violado, supuestamente, el auto de suspensión provisional de un amparo.
Cada día nos vemos sometidos a fuertes críticas y presiones que, previsiblemente, arreciarán, porque el propósito es parar, a como dé lugar, el proyecto que muchos mexicanos estamos impulsando, con miras al 2006.
Por eso, hoy 6 de julio, Día de la Democracia en la Ciudad , desde aquí me dirijo a nuestros adversarios políticos para decirles que no se vale que a mí o a cualquier otro ciudadano, aunque representemos proyectos distintos y contrapuestos, nos quieran quitar, a la mala, torciendo la ley, nuestros derechos políticos. Que nos ganen en las urnas, eso es lo que les estoy pidiendo.
Andrés Manuel López Obrador
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